…Al transcurrir del tiempo
A muy temprana edad, decidí mi destino profesional, núnca he visto atrás, ni me he arrepentido, de las decisiones tomadas, con el correr de los años, ha habido decepciones, y éxitos, momentos de cosecha y muchos quizá los más, de no saber que deparó el futuro.
Ser maestro no es fácil, son logros nunca vistos y grandes esperanzas, hoy a la mitad de mi vida, sigo sin arrepentirme, y puedo ver que hay un legado intangible, pero al mismo tiempo como todo sueño, pudo ser plasmado; un dicho mexicano dice “si quieres dejar algo, escribe un libro, ten un hijo y planta un árbol”.
Yo he podido escribir libros, he dedicado varias colecciones a la mejora académica, desde la educación inicial hasta la tercera infancia — los trece años cursando el sexto grado de primaria. Nunca pensé que llegaría a escribir tantos, me han dado gran satisfacción, y sin embargo como sucede en la docencia, los resultados sean momentáneos o perennes, no me toca verlos realmente.
Siempre inquieta, y… aunque no es una planta, decidí crear a través del crochet, primero como una fuga, después sin darme cuenta… ahora lo veo, también como un legado lleno de color, diseño y creatividad que al compartirlo siento que una parte de mí la doy en cada prenda, artículo u objeto que sale de mis manos y mente.
Pero el paso más importante es que dejo en el mundo a mi hija, a quien espero llene de felicidad, fortaleza y sabiduría para formar parte de un mundo que sea mejor.
Entre la intangibilidad de las emociones y nuestros hechos reales, solamente confío que lo bueno siempre sea todo lo mejor y sólo lo mejor.
… with the passage of time
At a very early age I decided on my professional path, I’ve never looked back nor have regretted the decisions I’ve taken with the passing years. There have been disappointments and successes, moments of plentiful harvest, and others, perhaps the majority, of not knowing what the future will bring.
Being a teacher is not easy, of achievements never seen and of great expectations. Today, halfway through my life I continue without regrets and I can see that there is an intangible legacy, but at the same time as with any dream I can also see that it can be embodied. There is a mexican saying that goes “If you want to leave something, write a book, have a child, and plant a tree.”
I’ve had the chance to write books, dedicating several collections to academic improvements covering initial education through to the third childhood — the age of thirteen going in 6th grade. I’d never thought I would write so many and they’ve given me great satisfaction, nevertheless as occurs in teaching, the results are momentantary or perennial. I don’t really get to see them.
Always restless I… and while it’s not a plant, decided to create through crochet. First as an escape, and later without realizing… I now see it also as a legacy full of colour, design, and creativity that when sharing feels like a part of me is given in every garment, accessory, or object that arises from my hands and mind.
But the most important step is that I leave my daughter in the world, who I hope I filled with happiness, strength, and wisdom to form a part of a world that is better.
In between the intangibility of emotions and our concrete actions, I only trust that what matters will always be the best, and only the best.
Escrito y compartido en español por Carmen Graciela Lira Espinosa en el invierno de 2021.
Traducido al inglés por Oscar Alfonso.
Written and shared in Spanish by Carmen Graciela Lira Espinosa in the winter of 2021.
Translated into English by Oscar Alfonso.