Shared by Gabie M

Knitting is kind of pointless. 

Seriously. You can spend hours and hours making something and you won’t know if it will turn out right until it’s done!  Or at least, not until it’s too far done, that you are too lazy or stubborn to remake it. 

Not only that, but it’s ridiculously expensive. I used to think that if you made something yourself it would be cheaper!  You are the one putting in the time and labour to actually make the darn thing, but to buy a blanket’s worth of quality yarn you’ll probably spend at least $400. Even with cheap yarn, a blanket will cost around $100 to make. Since I started playing with yarn, I guess that I’ve probably spent near $1000 on yarn and all the tools that go along with it. Honestly, it’s definitely ……I don’t want to keep track.

Now, say you make a scarf for someone else. You are giving them a gift that says ”here is something expensive that doesn’t look expensive that took 10 times as long to make compared to the $20 scarf I could have given you.” My inefficiency is a token of affection. AND! I enjoyed making it more than you will enjoy wearing it. So really, it’s a selfish gesture.    

Not to mention the fact that I will probably get really bad arthritis from knitting so much. I am going to have knobbly, crooked fingers when I’m older —but it’s worth it?  Maybe?? 

I really do like knitting.  It makes me feel like I am being productive in my lazy, self-lying-around-on-the-couch down time. But again, productive how?  Sure, there is a product. Useful and efficient use of my time though? Probably not. More productive than just watching TV or playing games on my phone? Yes, that’s the excuse that keeps me feeling safe and secure in my yarn addiction. 

I only started knitting a few years ago and I can’t remember how many things I’ve made now (way too many to count).  I do wear some of them, I have gifted away some of them, and some of them sit in my closet collecting dust.  Sometimes I have up to seven projects on the go at once because I find a new yarn or a new pattern and I get sidetracked. With all those on the go at the same time, sometimes it takes over a year to finish some!  They do all get finished eventually, although I do have a pillow case sitting in my yarn bin that’s been partially made for at least 2 years now, and hasn’t been touched in ages.  And each time I look for a new pattern, I find 5 more! 

It increasingly feels like it’s going to be a never-ending spiral of yarn weaving for the rest of my life, and honestly, I’m okay with that.  Pointless?  Well, maybe not as long as it makes me happy. 

Tejer es un poquito inútil. 

En serio. ¡Puedes pasar horas y horas haciendo algo y no sabes si te va a salir bien hasta que esté terminado! O a lo menos, hasta que he avanzado tanto, que eres demasiado floja o terca para reiniciarlo. 

Y no nada más es eso, es ridículamente caro. Antes pensaba que si hacías algo tú misma ¡sería más barato! Tú eres el que pone el tiempo y el trabajo para hacer la mendiga cosa, pero para comprar estambre de calidad para una cobija probablemente gastarás a lo menos 400 dólares, aún con estambre barato, la cobija costará alrededor de 100 dólares. Desde que empecé a experimentar con estambre, estimo que probablemente he gastado cerca de mil en estambre y en todas las herramientas necesarias. Honestamente, es definitivamente… no quiero ver las notas. 

Ahora, pon tú que haces una bufanda para alguien más, les estás regalando algo que dice “aquí hay algo caro que no se ve caro que me tardé diez veces más en hacer a comparación de una bufanda de 20 dólares que le pude haber dado.” Mi ineficiencia es la muestra de afecto. ¡Y! Lo disfruté más que tú lo disfrutarás traerlo puesto. Entonces de verdad, es un gesto egoísta. 

Ni mencionar el hecho de que probablemente tendré un muy mal caso de artritis de tejer tanto, voy a tener dedos chuecos cuando sea mas grande — ¿Pero vale la pena? ¿¿Quizás??

De verdad me gusta tejer. Me hace sentir que estoy siendo productiva en mi flojo -ando-en-el-sofá-inactiva. Pero otra vez, ¿productiva cómo? Supongo que hay un producto. ¿Útil y eficiente uso del tiempo? Probablemente no. ¿Más productivo que nada más ver la tele o jugar en mi celular? Sí, esa es la excusa que me mantiene cómoda y segura en mi adicción estambral. 

Yo apenas empecé a tejer hace unos años y no puedo recordar cuantas cosas he hecho (demasiadas para contar). Algunas sí me las pongo, algunas las he regalado, y algunas coleccionan polvo en mi clóset. A veces tengo siete proyectos al mismo tiempo porque encuentro un nuevo estambre o un nuevo patrón y me distraigo. Con todos esos al mismo tiempo, a veces me tardo ¡más de un año en terminar unos! Eventualmente todos si se terminan, aunque tengo una funda de almohada en mi bote de estambre que va en camino ya como dos años y no ha sido tocada desde el año del caldo. Y cada vez que busco un patrón nuevo, ¡Encuentro cinco más!

Más y más se siente que será un remolino sin fin de tejer por el resto de mi vida, y honestamente, no me molesta. ¿Inútil? Pues quizás, no mientras me haga feliz.